El día asoma su luz,
tras la tormenta,
despierta con timidez
su rostro al alba.
Siente el frío en su piel,
mirando al horizonte,
sentenciando lejano monte.
El cielo observa
Enero lleva
de la mano
nubes de ojos,
y vuelan.
El día asoma su luz,
tras la tormenta,
despierta con timidez
su rostro al alba.
Siente el frío en su piel,
mirando al horizonte,
sentenciando lejano monte.
El cielo observa
Enero lleva
de la mano
nubes de ojos,
y vuelan.