Quedan estrechas las miras, carencia de holgura en corazón, se acostumbró a vivir lo que no era y ahora desconoce verdad en la razón.
Se encierra en su jaula, coloca una venda y escucha al Adán exiliado del ideado Edén.
Levanta su lente, ha encontrado nuevo entretenimiento, se repite la misma historia, en el paraíso exiliado del lento respirar.