Ayer tuve un sueño
entre tanto silencio
una voz susurro…
¡HUYE DEL DIAMANTE NEGRO! .
Esa voz cada vez
alzaba más su grito…
¡HUYE DEL DIAMANTE NEGRO! ,
salí al mundo sin entender
voces de luchas encubiertas...
¡HUYE DEL DIAMANTE NEGRO! ,
gritaba la voz sin sosiego,
el diablo blanco
con serpiente entre letras,
usará gran dragón
recién llegado
para vender vuestro cuello…
¡HUYE DEL DIAMANTE NEGRO! ,
escondelo bajo tierra
en la profundidad
de ciega ignorancia.
Bajé mi calle
con el corazón en una mano
y el miedo en la otra.
Lo vi llegar
con traje de seda,
cartera llena
y lágrimas cayeron.
Otra vez la espalda
como respuesta,
intereses ordenan…
no manda pueblo.