Roto el corazón,
deshecho de sentimiento,
no existe playa,
donde orilla descansar.
Lágrimas ondean
en el horizonte,
dejando sal
en la piel.
Llegan
y se esconden
en las cuevas,
donde voz calla.
No existe eco
en la oscuridad,
entre sus rodillas
el aire no vuela.
Agarra su cuerpo
con propio calor,
cierra los ojos
y cae de nuevo.
Durante unas horas,
regresa a su esquina,
se esconde tras toalla
y traga su arena.
Es invisible
a tus ojos,
escapa tristeza,
vuela alto.
Bello
Gracias