Existe un punto de doblegacion, rotura, un punto inflexible donde al presionar todo se rompe.
Miles de sílabas se lanzan al aire, el llanto de lo pronunciado se ciñe a estela.
Vuelan los diptongos lejos de cualquier contrato, comas se divierten saltando de una línea a otra, van dejando huellas.
Los puntos finales se deslizan a posteriores líneas, sin paracaídas se instalan en los siguientes.
¡ Ojo con ellas!, muestran monstruos escondidos, una vez vuelan no hay belleza que las tape.
¡ Ten cuidado con ellas!, mostrarán oculto tras apariencia, colocarán letrero con párrafos bailando …
«Palabras, el viento no las lleva, siempre se quedan entre invisible tinta«,
los años entre danzas dejarán heridas en ellas.

Existen palabras que ocultan miedos, odio y los reviven en el mundo irreal.